Dulcinea deja escuchar su lamento en el FIC

GUANAJUATO, GUANAJUATO (21/OCT/2012).- La compañía canadiense Dulcinea Langfelder ofreció en el Teatro Cervantes de esta ciudad una comedia inteligente que mezcla disciplinas como el teatro, la danza, la música y el multimedia, para dar voz a la musa de El Ingenioso Hidalgo Don Quijote de la Mancha en el marco del 40 Festival Internacional Cervantino, que concluye hoy.

Con ciertas improvisaciones en el escenario, que de acuerdo con la fundadora y directora de la compañía Dulcinea Langfelder "no son casuales", la protagonista comparte con el público el sentir de esa mujer imaginaria, amor platónico del caballero andante creado por el escritor Miguel de Cervantes Saavedra.

"El lamento de Dulcinea" invierte los papeles, ahora es ella la que tiene voz y se convierte en protagonista, sus pensamientos son atrevidos, cabalga en el sentido de su propia búsqueda y se cuestiona el papel que han tenido las féminas a lo largo de la historia.

Acompañada por sus "honorables colegas" (técnicos de la compañía) y de videos interactivos, Langfelder recrea fragmentos de la obra de Cervantes desde una visión femenina, pues de acuerdo con la protagonista "Dulcinea pudo haber ayudado al Quijote a salvar el mundo".

Langfelder, en un gran esfuerzo por dominar el idioma español, pues ella nació y creció en Nueva York, conversa, canta, baila y se adueña del escenario para arrancar las risas del público que atento disfruta del espectáculo.

Dulcinea se muestra como emblema de la caballería y el amor cortés, en un tiempo donde la mujer lo mismo era alzada en un pedestal que carbonizada sin piedad, por lo que rinde una especie de tributo a esas mujeres que sobrevivieron a la historia escrita.

Un total de 11 capítulos desarrollados a lo largo de una hora y 20 minutos, confirman que se trata de una pieza multidisciplinaria cocinada a fuego lento, que se escribe al tiempo que se realiza el montaje, otorgando al espectáculo momentos de franca ironía y diversión.

Con música de Phillippe Noirealult, "El lamento de Dulcinea" es creación de la propia Langfelder, bajo la dirección de Alice Ronfard, la escenografía de Ana Cappelluto y la colaboración de Vincent Santes e Yves Labelle, entre otros.

Dulcinea Langfelder & Co se dedica a intentar mostrar una vida más soportable por medio de la creación de espectáculos multidisciplinarios que provoquen un remolino que renueve y desempolve el pensamiento.

En 2011 presentó en el Festival Internacional Cervantino su obra "Victoria" y ahora regresa para cosechar nuevamente el reconocimiento del público cervantino, que agradeció con una fuerte ovación el esfuerzo de la agrupación.