Domingo, 01 de Diciembre 2024
Cultura | En escena, la soledad y el vacío

Desaire de elevadores, un espacio para la confesión

El director Alberto Villarreal eligió un elenco local para presentar la obra, que mañana llega a la cartelera

Por: EL INFORMADOR

En Desaire de elevadores, los personajes no se escuchan realmente.E. BARRERA  /

En Desaire de elevadores, los personajes no se escuchan realmente.E. BARRERA /

GUADALAJARA, JALISCO (26/MAY/2011).-  Dormir no siempre es fácil cuando la soledad está presente en los corazones; así lo demuestran cuatro hombres y cuatro mujeres que todas las noches se reúnen en el departamento 401 para hablar de sobre sus conflictos y deseos en la puesta en escena Desaire de elevadores, escrita y dirigida por Alberto Villarreal.

La historia indaga en la nostalgia y en el origen, “en ese volver al agua”, expresa el director capitalino, quien eligió a un grupo de actores locales para llevar a escena el texto que busca cuestionar a los espectadores sobre la vida. 

Aunque la obra ya se presentó en la Ciudad de México, es la primera vez que Villarreal dirige Desaire de elevadores, que hoy abre temporada, a las 20:30 horas, en el Teatro Experimental de Jalisco.

El proceso de trabajo comenzó hace un mes, pero la producción llevó más tiempo, ya que los actores - Ana Elisa Fernández, Vera Wilson, Bernardo Cárdenas, Andrés David, Karina Hurtado, Carlos Cacho, Jesús Hernández y Sara Isabel Quintero- habían sido reunidos previamente para conocer el texto.

Para el director, la obra posee profundidad e inteligencia, en lo anterior coinciden los actores que dicen estar preparados para el estreno en la ciudad de Desaire de elevadores, proyecto que contó para su realización con el apoyo de Cultura UDG. 

Por su parte, Jesús Hernández califica la obra como “muy hermosa, muy profunda y tiene momentos de diversión. Es fascinante, y mi personaje también, lo que me alienta a seguir trabajando”.

Andrés David expresa que el espectador verá la vida de los ocho seres humanos y  mirará a través de la soledad que vive cada uno. “La mayoría son personas solas que no conviven porque están encerradas en ese mundo suyo, su departamento, además, es un poco la idea en general de cómo vivimos en sociedad, en donde estamos aislados en nuestra casa y ciudad y no nos abrimos realmente al mundo ni las personas, no nos interrelacionamos realmente con la gente”. Agrega que la obra muestra “la falta de comunicación verdadera, porque los personajes se reúnen para hablar pero ninguno se escucha realmente”.

También se presenta al clásico colado y mentiroso, el inquilino 305, que está interpretado por Carlos Cacho. Para Karina Hurtado “los personajes son sumamente complicados, de alguna manera, los espectadores se identificaran con alguno, eso es un hecho”.

Vera Wilson destaca que a Alberto Villarreal le gusta la disposición del espacio muy compuesta para que “el espectador esté viendo muchas cosas al mismo tiempo. El público tiene muchas cosas hacia donde voltear y eso da más información sobre todos los personajes”.   
 
El aprendizaje
 
Para los intérpretes trabajar con Alberto Villarreal ha sido una grata experiencia. Aunque el proceso se remite a un mes de trabajo, el aprendizaje en el terreno profesional es considerable. 

Bernardo Cárdenas dice sentirse apoyado por sus compañeros porque “yo vengo de un teatro más comercial y de los musicales, pero la complicación viene de la forma del estilo actoral”. 

Sara Isabel Quintero explica que el director se propuso metas muy precisas en todos los aspectos y “nos confrontó con la necesidad estar disponibles a toda hora y todos los días es decir que no estamos dando el resto del tiempo porque estamos de tiempo completo. Yo creo eso es un lujo que siempre hemos los actores”.
Además, la también directora de obras como El otro Einstein apunta que Villarreal tiene “una visión madura y distanciada de su propio texto para poder dirigirlo, eso me llama mucho la atención; además es una finísima persona, muy humana y muy profunda”.

Añade que “independientemente de lo vistoso de la producción, él dejó muy claro que todo el peso está en lo actoral”.

Para Andrés David, el trabajo de Villarreal es similar al de un director de orquesta porque “tiene una precisión absoluta de los tiempos, de cuándo debe entrar un parlamento. En realidad, nosotros nos hemos convertido en instrumentos musicales”.

Detalla que el capitalino posee “una gran precisión, que te lleva a un gran reto como actor”.

El resultado de casi un mes de trabajo será visto esta noche en escena con una obra que promete conmover a los espectadores y llevarlos a la reflexión del vacío y la soledad. Este montaje permanecerá en cartelera los jueves, viernes, sábados y domingos de mayo, junio y julio, en el espacio del Núcleo Agua Azul.

PERFIL
El dramaturgo


El director de escena Alberto Villarreal nació en la Ciudad de México, en 1977. Es también dramaturgo y actor. Estudió Literatura dramática y teatro por la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y ha trabajado en la Royal Court Playwrights de Inglaterra y en el Lark Center de Dramaturgia de Nueva York.
Actualmente es director de la compañía Artillería Producciones en Arte. Entre sus montajes destacan Réquiem de cuerpo presente para Alonso Quijano, Máquina Hamlet y en la ciudad ha presentado Tom Pain y Ensayo sobre débiles.

Desaire de elevadores / Alberto Villarreal / Teatro Experimental, Núcleo del Agua Azul / Boletos 120 pesos general y 100 pesos con descuento

Créditos

 Director y dramaturgo: Alberto Villarreal
 Asistente de dirección: Beto Ruiz  
 Actores: Ana Elisa Fernández, Vera Wilson, Bernardo Cárdenas, Andrés David, Karina Hurtado, Carlos Cacho, Jesús Hernández y Sara Isabel Quintero
 Diseño de escenografía, vestuario e iluminación: Julia Reyes

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones