Cuando la novela tiene sus fuentes en la historia

GUADALAJARA, JALISCO (30/DIC/2015).- “La isla tiene forma de ballena” es el libro más reciente de Vicente Quirarte. En esta nueva publicación, el autor ficciona a Margarita Maza, esposa de Benito Juárez, que vivió en el exilio en Nueva York durante la intervención francesa que colocó a Maximiliano en el poder mexicano. La novela histórica incluye una segunda línea narrativa con el Club Liberal Mexicano, establecido igualmente en la ciudad estadounidense.

El relato recurre a la historia de México, pero en sus páginas también encontraremos detalles de cómo lucía la ciudad de Nueva York en los años sesenta del siglo XIX. Para recrear esos aspectos de la microhistoria con detalles cotidianos de la vida en la isla, la principal fuente para Quirarte fue habitar en la ciudad, muy cerca donde vivió Margarita Maza y a un par de cuadras de la universidad. “Fue una investigación de campo maravillosa”, comenta en entrevista el autor, quien complementó el conocimiento de sitio con largas estancias en la Biblioteca Pública de Nueva York, donde consultó muchas fuentes.

Sin ser una novela epistolar, “La isla tiene forma de ballena” incluye en sus páginas cargas ficticias, a las que se suman pasajes del diario personal donde se dan cuenta de los acontecimientos.

Los personajes Margarita Maza y Sebastián Casanueva son las voces que explora Vicente Quirarte durante esos pasajes que se suman a la narración. De ellos, el escritor apunta: “Pensé que si utilizaba el epistoliario apócrifo de Margarita y el diario de Sebastián me permitía resumir muchos sucesos históricos que de otra manera me hubieran llevado más páginas”.

El autor utilizó este recurso novelístico gracias a su amplia experiencia como lector en general, pero en particular de novelas históricas y de la historia misma: “Un escritor de imaginación debe trabajar mucho más con la historia, con minúscula, que con la Historia. Su obligación es resumirla, apropiarse de ella y dársela al lector transformada”.

Un reto que tuvo Vicente Quirarte al escribir su novela y emplear la voz narrativa de Margarita Maza fue el tono que debió escoger: “Hacerla hablar desde la perspectiva de una mujer como ella: sobria, sencilla; una mujer que no era letrada, El acceso a la educación era muy reducido en su tiempo, y venía de una familia de clase media… Traté de imitar en lo posible su estilo retórico, su vocabulario, que se encuentra en sus cartas”.

En opinión de Quirarte, la figura histórica de la esposa de Juárez “no ha recibido la atención que merece”.

Novelar la historia

El periodo de la intervención francesa en México ha sido motivo de otras novelas históricas, entre ellas la celebrada “Noticias del imperio”, del reciente Premio Cervantes Fernando del Paso. A guisa de reconocimiento, Vicente Quirarte dedica la novela a Del Paso: “Ha escrtito la novela más importante sobre ese periodo en la historia de México, es un maestro”.

Sobre el papel de la documentación frente a la imagianción en los libros, comenta: “Cuando ‘Noticias del imperio’ apareció muchos historiadores la criticaron porque les parecía que no era precisa, que no era objetiva. Yo me sustento en la maravilla de afirmación que hizo Edmundo O’Gorman: ‘la virtud más grande de un historiador es la imaginación’. El historiador, como el novelista, une a través de un hilo conductor todos los elementos que ha recogido en su trabajo de investigación”.

Desde que Fernando del Paso publicó su tercera novela, en los ochenta, hasta hoy, en México la novela histórica ha tenido mucha aceptación. Sobre ello, Vicente Quirarte advierte: “¡Qué bueno! Pero insisto en que hay que regresar a leer a los grandes historiadores. Ahí está el germen, la historia fija, como debe de ser. La novela tiene otros elementos, tiene la obligación de inventar reinos imaginarios, la novela histórica parte de realidades concretas y con elementos de imaginación”.

Pero, eso sí —aclara el autor—, hay que reconocer las diferencias: “Me preocupa que la novela sea utilizada como una fuente histórica. Para eso tenemos a los grandes historiadores, como Álvaro Matute, Enrique Krauze. La gente es muy floja para leer historia, prefiere que se la den digerida y en la boca”.

En opinión de Quirarte, algunos novelistas que ejercen el género histórico “vuelven a decir lo que ya un historiador ha puesto: es una pereza del novelista que toma los datos y vuelve a contar la historia que ya contó el historiador”.

SABER MÁS
Un poco más sobre la novela

• Sinopsis: Mientras en territorio mexicano Benito Juárez lucha por mantener la legitimidad de su gobierno a bordo de su carroza convertida en ambulante palacio presidencial, se establece en Nueva York el Club Liberal Mexicano para unir fuerzas contra el imperio de Maximiliano y la intervención francesa desde el exilio. La más ilustre de los expatriados se llama Margarita Maza. Desde el país vecino, los liberales serán protagonistas indiscutibles de cambios decisivos para el devenir de México.

• “La isla tiene forma de ballena” está a la venta en Gandhi en su versión impresa y electrónica a un costo de 198 y 139 pesos, respectivamente.