GUADALAJARA, JALISCO (08/ABR/2017).- Después de que la Fundación Juan Rulfo se retirara de la Fiesta del Libro y la Rosa por estar en desacuerdo por la presentación del libro, que ellos consideran difamatorio, “Había mucha neblina o humo o no sé qué. Exploración sobre la obra literaria de Juan Rulfo”, de Cristina Rivera Garza, la misma escritora se manifestó por medio de una carta dirigida a sus lectores.El desaguisado ocurrió porque la Fundación, que dirige Víctor Jiménez, considera que el libro de la también investigadora y poeta, es difamatorio. “Hago de su conocimiento que cancelo definitivamente mi participación en la Feria del Libro de la UNAM (sic) y le ruego suspender la presencia de cualquier material con imágenes y el nombre (sic) de Juan Rulfo que tuviesen previsto desplegar en el recinto, en pequeño, mediano o gran formato”, escribió por medio de un correo electrónico dirigido a la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM.En la carta que publica Cristina Rivera Garza, se desmarca de las acusaciones de la Fundación Juan Rulfo: “’Había mucha neblina o humo o no sé qué’, más que un libro sobre Rulfo —lo he dicho ya varias veces en presentaciones y entrevistas— es un libro que, moviéndose alrededor o a través de Rulfo, invita al lector a tocar el territorio de un país en vilo. Así es: uno piensa que va en busca del pasado y lo que encuentra a cada rato es esa cara a la vez irresuelta y esperanzada, precaria y atroz, del presente.”, señala en la carta publicada en La Langosta Literaria, una página de promoción a la lectura impulsada por su casa editorial Penguin Random House.Confianza en sus lectoresLa escritora responde a los lectores que le han preguntado sobre la calificación emitida acerca de su libro, que motivó la petición de la Fundación Juan Rulfo para que la Fiesta del Libro y la Rosa no use ni el nombre ni la imagen de Juan Rulfo. Ella pide a sus lectores que vayan cotejando argumentos y evidencias para formar comunidades vidas, alertas a los retos del presente. “Invito a los lectores que ahora me preguntan sobre la calificación emitida acerca de ‘Había mucha neblina o humo o no sé qué’ que no se distraigan, que confíen en sí mismos: abran esa puerta, sí, y entren en el libro. Lean, cotejen, comparen, contrasten, regresen, subrayen, anoten, debatan —si fuera de su interés—, disientan —si ese fuera el caso—. Las páginas son todas suyas. Supongo que es así que los libros van armando sus propias esferas de afecto”.Cristina Rivera Garza enfatiza que este libro se trata de una relación a la que no duda en calificar de sagrada, pues es la relación de una lectora y un texto. “Nada más, nada menos. Aposté ahí, en ese libro, a la escritura en plural, una escritura que se vale por igual de las herramientas de la investigación histórica o de los métodos de la etnografía, así como de las estrategias propias de la ficción, para construir un texto colindante, entre géneros, con/ficcionado en compañía de tantos otros y otras. Sigo pensando que el libro comunalista es posible. Que es deseable”.