Cultura | El psicólogo y columnista presenta 'Confidencias de un taxista' Confidencias sobre ruedas con Dellamary En el texto se expone la deshumanización moderna desde la aguda y pícara visión de un taxista Por: EL INFORMADOR 18 de agosto de 2014 - 01:40 hs Dellamary se dijo fascinado por la capacidad que tienen los taxistas para escuchar, aconsejar y a sus clientes. / GUADALAJARA, JALISCO (18/AGO/2014).- El psicólogo y columnista Guillermo Dellamary presenta Confidencias de un taxista, novela que retrata las anécdotas, peripecias y pensamientos —propios y ajenos— de un conductor que recorre la ciudad. En palabras del autor uno de los motivos para escribir un texto cuyo protagonista fuera un taxista es por la deshumanización y despersonalización que se vive en las calles de las ciudades modernas, pues la falta de contacto humano es algo muy común. El encanto que posee el habitáculo de un taxi radica en que una persona se puede enfrascar en una conversación profunda con alguien que minutos antes no conocía. Para Dellamary, “si alguien extranjero quiere conocer qué sucede en el país al que llega, debe hablar con un taxista, que sabe las versiones oficiales y además conoce la versión de la calle. Es increíble lo que te puede contar un una persona que desempeñe este oficio”. Sobre el taxi, aclaró que es una profesión que le agrada, no sólo por esa comunicación poco común que logra entablar, sino también por los aspectos de movilidad. El estrés de manejar en las calles llenas de carros, los altos costos de mantener un vehículo y la gasolina pasan en ocasiones a segundo plano, cuando se cuenta con una persona de confianza. El psicólogo apunta que “es una profesión que conjuga el servicio, el acercamiento es muy humano, sensibiliza a las personas. Claro que hay taxistas distintos, que llevan su propia dinámica oyendo noticias, pero muy pocos me han tocado que sean antipáticos, por lo general son humanos sensibles”. Eso sí, el autor reconoce que dentro de todas las comodidades del taxi, no se incluye el precio. “Deberían bajar la tarifa de taxi y trazarse bien las rutas y los costos, hay muchísimas transas que ellos mismos confiesan”. En distintas disciplinas Detrás del libro Confidencias de un taxista, hay un autor que se prepara de forma constante. La formación profesional de Guillermo Dellamary comenzó con la psicología, con los años, ha buscado complementarla con otros elementos, siendo uno de los más destacados la filosofía. “No sentí que dentro de la psicología se daban respuestas sobre algunos fenómenos humanos, entonces busqué en las bases de la psicología, la filosofía: en ella se unen, se plantean, se integran y profundizan muchas cuestiones, mucho más que en la psicología”. Su labor como terapeuta se ve reflejada en el libro, pues de cierta manera abordar un taxi y charlar es también un ejercicio terapéutico en el que los honorarios son sólo el costo del pasaje: “Mis experiencias en el consultorio las plasmé como si fueran pláticas con un chofer de taxi: las historias poner esas situaciones en ese contexto de conversación”. Una de las historias es la que da subtítulo al libro, Me tomaron por sorpresa, en el que narra las vagancias de un muchacho que se sube a una unidad, pero cuando desciende se va corriendo a toda prisa para no pagar: el pasajero mañoso siempre escogía bien a sus víctimas, taxistas con algo de sobrepeso que con certeza nunca se iban a bajar a corretearlo. Entre la picardía y el drama, el libro se va tejiendo, sin dejar de lado la nobleza inherente en el ser humano, como en un apartado donde relata que sin esperarlo, un chofer recibe el doble del pago, a modo de gratificación por saber escuchar al pasajero y resolver sus problemas con la calma que imprime una opinión ajena al conflicto. “Muchas veces con sólo escuchar puedes ayudar mucho, y los taxistas saben escuchar”, reflexiona Dellamary. SABER MÁSTentado a una segunda parte Son tantas las historias que Guillermo Dellamary ha escuchado que bien podría redactar un segundo volumen, sumado a que los lectores le han comentado que es un libro de una lectura muy agradable. El formato del libro Confidencias de un taxista está estructurado en breves capítulos, con la intención de hacer la lectura más ágil. “En cualquier punto que se comience se puede avanzar, se puede dejar de lado y luego retomar sin problema”. Cada capítulo muestra a un pasajero que expresa una historia personal, desde un político, una pareja que riñe, una mujer con conflictos personales, entre otras historias que el escritor quiso novelar y en las que su objetivo fue igualmente dejar un mensaje implícito. “Lo importante no es escribir el libro, sino que tenga algo que aporte”, apunta el autor, quien busca exponer un lenguaje cotidiano, y a veces un tanto picoso. “Yo no uso el lenguaje soez, pero en el libro sí, esas palabras las dicen los personajes, porque tiene una fuerza y espontaneidad enorme. El lenguaje es maravilloso”. Temas Literatura Libros Guillermo Dellamary Lee También Amin Maalouf recibirá el "36 Premio Internacional Catalunya" Grupo Planeta echará la casa por la ventana Foro Audio FIL: el punto de encuentro para los amantes del formato sonoro Recibe las últimas noticias en tu e-mail Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones