Concluyen restauración del Órgano de Catedral Metropolitana

CIUDAD DE MÉXICO.- El Órgano del Evangelio de la Catedral de Ciudad de México, construido en 1735, cuya restauración costó 15 millones de pesos (un millón de dólares) será afinado en abril y mayo para dar su primer concierto en junio próximo, dijeron hoy fuentes oficiales.

El órgano, compuesto por de 3 mil 600 flautas y aproximadamente 6 mil variaciones sonoras, mide catorce metros de alto, diez de ancho y tres de profundidad, está situado seis metros por encima del suelo, lo que le da una altura total equivalente a un edificio de seis pisos, indicó el director de Sitios y Monumentos del Patrimonio Cultural, Xavier Cortés.

La pieza está coronada además por una treintena de ángeles con instrumentos musicales, como si fueran una orquesta.

Muchas de estas figuras fueron parcialmente carbonizadas en un incendio, mientras el medallón de la Virgen que custodiaban fue consumido por las llamas.

El funcionario explicó que el instrumento será afinado durante las madrugadas de abril y mayo, como parte de la etapa final de los trabajos de restauración iniciados a principios de 2007 y que le devolvieron la majestuosidad original.

El Órgano del Evangelio fue diseñado en 1735 por el artesano José de Nazarre, quien se basó en los modelos de la Catedral de Valencia, España, que fueron dados a conocer en su época por los discípulos de fray José de Echevarría, dijo el experto en órganos Oscar Laguna.

"Estamos hablando del primer conjunto de órganos gemelos más antiguos de México y que han sido conservados de manera íntegra a pesar de los siniestros, como el incendio ocurrido en 1967", comentó Laguna.

En la Catedral Metropolitana se encuentran tanto el órgano del Evangelio, como el de la Epístole, los cuales han sufrido diversos daños a lo largo del tiempo.

Laguna explicó que la restauración se prolongó 18 meses debido a los cuidados para proteger todas las secciones del instrumento y llevarlas a un taller en Barcelona donde se realizó la tarea de restauración.

Laguna, que trabaja desde hace 15 años en los talleres de Barcelona y actualmente se encarga de la armonización del órgano, recordó que el objetivo para los próximos meses será hacer recobrar al instrumento su sonoridad original y añadió que los órganos son instrumentos muy complejos.