Ballet de la Ciudad de México celebra 20 años de 'Pedro y el lobo'

CIUDAD DE MÉXICO (17/ENE/2015).- Con música, danza y personajes disfrazados, el Ballet de la Ciudad de México celebró el XX aniversario de su versión de "Pedro y el lobo", composición de Sergei Prokófiev, en el inicio de temporada en el Teatro Helénico del Centro Cultural Helénico.

Con un lleno total en el recinto capitalino, donde la agrupación se presentará hasta el 22 de febrero, niños y adultos disfrutaron del cuento clásico, bajo la dirección artística de Isabel Ávalos y la narración de Samuel Escobar.

Una casita de madera, una acera y varios árboles, sirvieron de escenografía para el espectáculo en que los bailarines del Ballet de la Ciudad de México brillaron por su técnica y talento, con algunos toques de humor para arrancar las carcajadas de los infantes.

Movimientos acrobáticos de "El lobo" y "El gato", que bailaron alrededor de "Pedro" y otros personajes alrededor de una hora, para que al final de la presentación, el público respondiera con fuertes aplausos.

El narrador invitaba a los asistentes a aplaudir como si fuera un director de orquesta, mientras daba una introducción sobre la vida de Sergei Prokófiev (1891-1953), desde su niñez hasta que se convirtió en un prolífico compositor.

El espectáculo "Pedro y el Lobo" comenzó con la presentación de cada uno de los personajes a cargo del narrador como "Pajarito", representado por la flauta y la danza clásica; "El Pato", por el oboe y la danza contemporánea; "El Gato, por el clarinete y la danza de carácter, y "El Lobo Gris", por los cornos y movimientos acrobáticos.

"Pedro" es representado por instrumentos de cuerda y la danza de carácter; los disparos de los rifles de los cazadores, por los timbales y tambor; "El Abuelo", por el fagot y con movimientos de danza de carácter.

La historia inicia con las advertencias del Abuelo hacia Pedro sobre un peligroso Lobo gris. Pedro sale a jugar, pues asegura ser valiente y no tener miedo a los animales peligrosos. Mientras juega con el Gato, el Pato y el Pajarito, el gran Lobo gris se encuentra al acecho.

El Lobo atrapa al Pato, pero Pedro y sus amigos logran capturar al Lobo gris y lo entregan a unos cazadores para que lo lleven al zoológico. Todos bailan y festejan alegremente, incluso el Abuelo quien se siente muy orgulloso de su nieto.