Avanzan las excavasciones del juego de pelota en Guachimontones

TEUCHITLÁN,JALISCO.-Existen tres tipos de juegos de pelota en la Zona Arqueológica de Guachimontones –ubicada en la comunidad de Teuchitlán, Jalisco-, los trabajos de excavaciones se concentran en el llamado tipo dos. Los trabajos en la cancha, ubicada después del Centro Interpretativo Guachimontones y antes de las estructuras centrales del sito, se encuentran al 50 %, pero la falta de recursos económicos en este 2010 podría afectar las investigaciones, según explica el arqueólogo Rodrigo Esparza López.

El también codirector del proyecto arqueológico Guachimontones señala que cada año disminuye el presupuesto otorgado por Gobierno del Estado.
En años anteriores, las cantidades destinada a la investigación oscilaban entre un millón y medio de pesos hasta dos millones y medio.

En este 2010 será de 800 mil pesos. “Con este recorte no sabemos si vamos a tener recursos para continuar con la investigación”, afirma el arqueólogo.

Las excavaciones del juego de pelota tipo dos de Guachimontaones tienen tres temporadas de campo. La arqueóloga Erika Blanco explica que los trabajos comenzaron en 2008. El pasado 2009 se abrió la parte Sur de la cancha, lo que permitió saber que la cancha mide aproximadamente 110 metros de largo, “pensábamos que era más pequeño, pero es muy ancho, sería uno de los más anchos que hay en todo el sitio, y eso muy largo, lo curioso es que no está anexo a la plaza principal, como el juego monumental”, explica la responsable de las obras de excavación del juego de pelota tipo dos.

“Lo importante de este juego de pelota es que se utilizó durante época de la Tradición Teuchitlán –así se le conoce a la cultura de los Guachimontones-, y también encontramos una ocupación posclásica”, destaca Erika Blanco.

 De la ocupación posclásica, señala que se trata de pobladores que llegaron 500 años después del abandono de Guachimontones,  pero no utilizaron el juego de pelota como tal sino que se le dio un carácter habitacional, ya que se han encontrado varios cuartos.
“En la parte Norte salió otro cuarto, un fogón muy grande, escoria de cobre, una ofrenda integrada por ocho cascabeles y huesos de ave”, precisa Blanco.  

La hipótesis 

La arqueóloga Erika Blanco es autora de una tesis de maestría en la que explica las funciones de los juegos de pelota tipo uno y las del tipo dos, el documento se ha nutrido de los trabajos realizados en el sitio.

La responsable de las excavaciones explica que en los juegos de pelota tipo uno “se habrían podido realizar funciones políticas y religiosas, mientras en los que están fuera de los centros principales pudieron tener un carácter domestico, pero con la misma connotación  religiosa pero en una actividad más de la gente”, detalla la arqueóloga.

En la zona se han encontrado más de 87 canchas, de las cuales siete son monumentales, es decir las que están anexas a los centros ceremoniales principales, y el resto como la que se excava es  de uso doméstico.

Los trabajados en el juego de pelota tipo se encuentran al 50 %, señala que este retraso se debe a los hallazgos posclásicos. “Todos lo encontrado se registra porque tiene la misma importancia, ya se están formando teorías  sobre los habitantes del posclásico”, destaca la arqueóloga.

Los  hallazgos 

La estructura del juego de pelota de Guachimontones comparado con otras tradiciones es muy similar, sin embargo las canchas no tienen aros ni indicadores, “se trataba sólo de golpear la pelota para que no cayera, sabemos que eran cuatro jugadores. Un dato relevante en el sitio es que apareció como sacrificio un poco de arcilla quemada, falanges y cráneo, que no habíamos encontrado, el individuo fue manipulado después de muerto, lo que habla de que sí hubo sacrificio, esto sólo se encontró en el juego monumental, donde lo ritual o la política iba siempre de la mano”, comenta Blanco.

Mayra Torres de la O  


Joyería única 


Otra de las características únicas de la Tradición Teuchitlán es su joyería y navajillas prismáticas, elaboradas de obsidiana gris verdosa.

Los investigadores de la Zona Arqueológica Guachimontones explican que las grandes piezas de joyería sólo se han encontrado en colecciones privadas, ya que en el campo sólo “hemos encontrado sólo los fragmentos”, explica el investigador Rodrigo Esparza.

Durante las excavaciones de la zona de talleres donde se encuentra el Centro Interpretativo Guachimontones se hallaron unos pendientes, delgados y de formas antropomorfas.

“Es una tecnología única en Mesoamérica no existe una donde hacían una joyería fina, tan precisa, lo interesante es que son materiales que proceden de un yacimiento cercano”.