Domingo, 24 de Noviembre 2024
Cultura | El Ayuntamiento de Guadalajara trabaja en el rescate de la finca del siglo XVIII

Avanza recuperación de la Casa Reforma

Con una partida de cuatro millones de pesos, procedentes de la Federación, el Ayuntamiento de Guadalajara trabaja en el rescate de la finca del siglo XVIII

Por: EL INFORMADOR

Hace dos meses comenzó la intervención, cuyo principal fin es retirar la estructura que la sostiene.  /

Hace dos meses comenzó la intervención, cuyo principal fin es retirar la estructura que la sostiene. /

GUADALAJARA, JALISCO (25/JUL/2014).- Como uno de los “proyectos entrañables” de la presente administración municipal, de acuerdo con Ricardo Duarte, titular de la Secretaría de Cultura de Guadalajara, la obtención de cuatro millones de pesos para la intervención de la Casa Reforma (finca patrimonial de valor relevante que se convertirá en un nuevo centro cultural en manos de los actuales comodatarios del inmueble, la compañía de títeres La Cooperacha) significa un ejemplo de cómo “las instituciones públicas se suman a iniciativas ciudadanas”, en un esfuerzo conjunto que, en esta primera de cuatro etapas que se han planeado, involucra artistas, gestores, el Ayuntamiento tapatío, la delegación Jalisco del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y la compañía privada a cargo de las obras.

Estos trabajos, que inciaron hace dos meses, son ahora posibles gracias a la solicitud de recursos que realizó la dependencia cultural del gobierno municipal ante la federación y, asimismo, porque en 2013 se consiguió modificar el contrato de comodato que se sostuvo con la compañía escénica para, en palabras de Duarte, “tener una voz más fuerte” de cara un proceso “con una visión institucional de continuidad” que, aunque marcado por “factores externos”, posee “cierta flexibilidad” y se centra en “evitar que avance el deterioro de la finca”.

De esta forma, como indicó el perito en restructuración Alejandro Canales (titular de la Escuela de Restauración de Occidente), los recursos se han aplicado en el “retiro y eliminación de flora parásita” que afectan la estructura del edificio, la colocación de testigos y soportes —debido a la fragilidad de la construcción—, así como una intervención que ha implicado “estudios de mecánica de suelos” y retiro de “elementos adosados que no eran los adecuados”.

El objetivo es, destaca Canales, culminar con la recuperación de “la fachada, y la primera crujía del edificio en sus dos niveles, así como las arcadas y columnas”, de manera que se preserven las características originales de la finca; además, parte de esta partida deberá utilizarse para “obras de tipo hidrosanitario e instalaciones eléctricas”, así como elementos de “accesibilidad universal” que se necesitan.

La emblemática edificación no será intervenida en sus 740 metros cuadrados, sino en las áreas del frente para volverla “funcional” y dejar libre la banqueta de la estructura metálica de apuntalamiento que actualmente presenta (y que “será retirada” por completo); por todo esto, enfatiza el especialista, es necesario “se gestionen otros recursos y se continúe con estos trabajos de prevención y conservación; siempre es preferible preservar a restaurar”.

TOMA NOTA

Van por más

> El secretario de Cultura de Guadalajara, Ricardo Duarte, señaló que se continuará con la procuración de fondos en instancias federales para seguir con las obras y “avanzar en los procesos”.

> A semejanza del Panteón de Belén, se persigue obtener “etiquetaciones sucesivas” en posteriores solicitudes de financiamiento ante la Cámara de Diputados federal para concluir con este “proceso de impacto para la comunidad” que, a pesar de todo, deberá calcular “sobre la marcha” los recursos que requerirá (que rebasarán, seguramente, los 26 MDP que se auguraron en un principio).

NUMERALIA

En torno al inmueble

4 millones
de pesos aportados por el Prespuesto de Egresos de la Federación (PEF)

730
metros cuadrados de superficie de la finca

4
meses para concluir la primera etapa de intervención

Por un proyecto comunitario


Antonio Camacho, director de la compañía de Títeres La Cooperacha —la más antigua de la ciudad—, aseguró que el proyecto para Casa Reforma es el de un espacio donde “se ofrezcan actividades dirigidas a la niñez”, con miras a “regresarle a la ciudad parte de la vitalidad” que se observaba en celebraciones del siglo XIX de las que se guarda testimonio.

El comodato que la compañía celebró con el Ayuntamiento tapatío —actual propietario del inmueble— es por 25 años y garantiza el uso de la finca hasta el año 2036; así, “el compromiso”, afirma Camacho, “es hacer teatro y, asimismo, recorrer las colonias marginadas de la ciudad y traerlos para que conozcan su centro histórico por medio de los títeres”.

De acuerdo con el testimonio del teatrista, se prevé habilitar la edificación con dos foros y ocho salas de exposición, además de un museo que cuenta ya con un acervo de 500 piezas originales de la compañía —lo que será la “colección permanente” del futuro recinto—, una ludoteca y un centro de enseñanza que estará “a disposición de los niños y del magisterio”.

A lo anterior, explica Camacho, se debe agregar una iniciativa que contempla programas de residencias “para que artistas del país o el extranjero vengan, vivan y generen aquí productos para la ciudad”; con todo, se contempla también un set de televisión y “un club de jazz nocturno”, puesto que el objetivo es “buscar la sustentabilidad de la casa” (aunque se cuenta también con recursos de la fundación española CODERE, por 650 mil pesos; aplicables al concluir estas obras de recuperación).

Una construcción emblemática

Cuauhtémoc de Regil, del INAH Jalisco, señaló que la intervención a la finca se está realizando con apego a las normas, criterios y reglamentos que establece la normatividad vigente, para lo cual están colaborando con “asesoría especializada en temas de conservación” y supervisión de las obras.

Asimismo, hizo énfasis en la importancia de un inmueble que forma parte “del patrimonio edificado de la ciudad”, una casa que si bien no puede datarse con exactitud la fecha de su contrucción, por “el testimonio de sus sistemas constructivos”, resulta claro situar sus orígenes durante la primera mitad del siglo XVIII.

El INAH “ve con buenos ojos” estas obras que lleva a cabo el Ayuntamiento, no sólo por la “riqueza relevante” de la finca, sino porque además otorga evidencias de los “procesos de organización social” en esta ciudad y permitirá “reinterpretar y estudiar” varios de sus periodos históricos; por esto, “es un ejemplo que deberíamos replicar, en especial en otras fincas patrimoniales”.

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