Atesora Biblioteca de las Artes parte de la historia cultural mexicana

CIUDAD DE MÉXICO (23/JUN/2010).- La Biblioteca de las Artes, del Cenart, convertido en un importante depositario de una buena parte de la historia cultural y artística de México, alberga, por ejemplo, el programa de mano de la obra teatral con la que se inauguró el Palacio de Bellas Artes.

También, en su acervo, es posible encontrar una fotografía autografiada por la cantante de ópera María Callas cuando pisó México, entre muchas otras memorias.

Contiene alrededor de 500 mil unidades entre libros, fotografías, partituras, publicaciones, bocetos, programas de mano, tesis y catálogos de exposiciones, lo mismo que libretos, videos y producciones discográficas, las cuales muestran lo mejor de las artes escénicas (teatro, danza y música), literarias, plásticas, cinematográficas y de educación artística.

Cuenta con los servicios de Sala de Consulta, Hemeroteca, Fonoteca, Fondos Especiales y espacio para exposiciones.

Es un lugar abierto a todo público, pues no sólo pueden acudir los propios protagonistas del movimiento cultural mexicano, sino todos aquellos interesados en saber más del arte de su predilección, siempre bajo la supervisión del personal que se encarga de resguardar la integridad del acervo, especialmente el más antiguo.

Beatriz Vidal del Alba asumió, recientemente, la dirección de la Biblioteca de las Artes.

En entrevista, la historiadora de arte resaltó la importancia de este recinto en el país, tras señalar que en México era necesario una biblioteca como ésta, la cual no sólo diera servicio a los profesionales o alumnos, sino a todo público.

'Es un espacio vital, ya que no podemos detener la memoria de nuestra cultura y el arte', señaló.

Explicó que debido a la grandeza del país y a la necesidad de que el acervo esté al alcance de más usuarios, fue que Beatriz Vidal se propuso reforzar lazos con todo tipo de redes y bibliotecas, a fin de extender el campo de acción.

'No queremos limitarnos al Distrito Federal, estamos en toda la República Mexicana y para ello se está haciendo la biblioteca digitalizada, es decir, para que nuestro acervo sea consultado a distancia en otras bibliotecas que tengan nuestro link de acceso', expresó.

El catálogo de la Biblioteca de las Artes puede ser consultado vía Internet, lo que permite al usuario de cualquier parte del país conocer los materiales que se localizan en este sitio, incluso, de las propias bibliotecas de las escuelas del Cenart.

Vidal calcula que en seis meses se logrará la vinculación deseada.

Para atraer más usuarios, la directora comentó que se inició una nueva etapa en la Biblioteca de las Artes, que consiste en la programación de espectáculos artísticos y conferencias que permiten vincular la teoría representada en el acervo documental con la práctica protagonizada por los propios artistas.

Queremos, dijo, que sea una biblioteca viva y participativa, donde haya confrontación con las temáticas que aquí se presentan.

'El contenido de nuestra biblioteca se verá ejemplificado con las actividades culturales programadas', estimó.

Una de las acciones más importantes que se emprenderán es la exhibición de la Pieza del Mes, que será elegida del área de Fondos Especiales, lo que permitirá que el visitante conozca los materiales más valiosos que posee dicho recinto.

El acervo de Fondos Especiales le ha dado un gran prestigio a la Biblioteca de las Artes, ya que resguarda documentos únicos.

Por su parte, Claudia Jasso, jefa de este último departamento, dijo que en áreas restringidas se albergan estos documentos (350 mil aproximadamente), los cuales, por su rareza, valor, antiguedad o formato físico, deben estar forzosamente en bodegas con clima y estantería especial para su mejor conservación.

No obstante, aclaró Jasso, hay materiales que sobresalen por su singularidad, como la colección fotográfica de artes plásticas conformada por 150 mil imágenes, donde destacan las de Juan Guzmán, quien tomará imágenes de artistas de la talla de Frida Kahlo y Diego Rivera.

También se cuenta con fotografías de alrededor del 70 por ciento de la obra de Rivera y Kahlo.

'Son de los materiales más solicitados por visitantes nacionales y extranjeros, que deben seguir el riguroso trámite de derechos de autor', acotó.

Recientemente llegó el acervo que perteneciera a Víctor Hugo Rascón Banda, el cual será inventariado en corto plazo por una especialista en la vida y obra del dramaturgo chihuahuense.

Sus documentos se suman a los que fueran de Xavier Rojas, Esperanza Iris y Rodolfo Usigli, cuyos libros aparecen autografiados por sus autores.

Dentro del ámbito musical sobresalen miles de partituras pertenecientes en su mayoría al siglo XIX.

También se encuentra la colección completa de la revista 'Hoy' (1937-1950), tomos de 'Revista de Revistas', el acervo de Manuel Enríquez y el programa de mano del estreno del 'Huapango', de Pablo Moncayo, en el Palacio de Bellas Artes.

Mención especial merece el programa de mano que se dio en la inauguración del Palacio de Bellas Artes en 1934. La verdad sospechosa fue la obra que se presentó en ese entonces con la compañía de María Teresa Montoya.

En el documento, integrado por varias páginas, aparece la información de los artistas, fotografías, incluso publicidad de la época.

Varios son los libros antiguos que resguarda esta área, siendo el más antiguo 'Vocabulario en lengua castellana y cora', de Joseph de Ortega, publicado en 1732.

En tanto, Celia Licona, encargada de la Hemeroteca, comenta que cuentan con alrededor de dos mil títulos y más de 45 mil fascículos especializados en todas las artes.

De lo más significativo se encuentra la colección casi completa de la revista 'Artes de México', con sus primeros números que datan de los años 40.

Por su parte, Ana Franco, jefa de Videoteca, señaló que tienen grabaciones de espectáculos que se han presentado en diversas épocas, en los recintos del INBA y del Conaculta.

En su opinión, uno de los tesoros de esta área es la colección de discos de jazz mexicano.

También lo son las series 'Los caminos de lo sagrado', sobre ritos indígenas mexicanos; y 'El alma de México', una revisión de nuestra cultura, desde la época prehispánica al siglo XX.

En la Sala de Consulta se encuentran los tradicionales volúmenes de enciclopedias y diccionarios especializados en las bellas artes.

También existen catálogos de obras colectivas e individuales, así como libretos de teatro mexicano y extranjeros. Aquí destaca una obra de teatro de José Emilio Pacheco titulada 'El pasado lo guardan las arañas'.

La Biblioteca de las Artes sigue enriqueciendo su acervo gracias a la mayor conciencia de quienes poseen documentos artísticos valiosos y que deciden donarlos a este espacio.

Mención especial merecen aquellos materiales que pertenecieron a iconos de la cultura nacional, quienes en vida deciden otorgarlos o en su defecto, sus familiares optan por donarlos a la biblioteca.

Los retos de esta administración encabezada por Betariz Vidal son establecer un registro de todas las imágenes que posee la Biblioteca de las Artes, así como de las escuelas del Cenart, en las bibliotecas Británica y Española, lo mismo que en la del Congreso y del Vaticano.

También espera ampliar más la biblioteca, ya que con el paso de los años, el acervo se ha ido incrementado y es necesario resguardarlo y conservarlo en espacios idóneos.