Ana María Matute rescata historias de la Guerra Civil

BARCELONA, ESPAÑA (26/NOV/2010).- Escribir una obra marcada por el deseo de expresar la pérdida ha sido la intención de la escritora catalana Ana María Matute, quien fue distinguida con el máximo galardón de la literatura en español, el Premio Cervantes.

 “He dado toda mi vida a esto que es escribir, a ser parte de la literatura", dijo la narradora de 85 años, una de las cinco académicas de la Real Academia Española.

Matute es cronista de una sociedad española desgarrada por la Guerra Civil, autora de varios cuentos infantiles. Es considerada una de las autoras más importantes de la época posterior a la Guerra Civil Española (1936-1939); entre sus obras destacan Pequeño teatro y Los soldados lloran de noche, que retratan a la sociedad de la época y las consecuencias del conflicto.

Para la autora de Los Abel, el Cervantes es un reconocimiento “al esfuerzo, a la entrega total de una vida”. Agrega que “uno no escribe para ganar premios, habrá quien lo haga, pero no entro en esas ferias; aunque, si te lo dan, maravilloso”.

Explicó que no conoció a las otras dos galardonadas con el Premio Cervantes, María Zambrano y Dulce María Loinaz. Citando a Borges, la escritora reconoció que está más orgullosa de los libros que ha leído que de los que ha escrito. “Leer es una parte esencial de mi vida, la mitad me la he pasado leyendo, a Dickens a Dostoievski... he sabido de los sentimientos gracias a ellos”, afirmó  Matute, que citó también los cuentos de Chéjov como la puerta que la llevó a la literatura. 

La autora dio pocas pistas de su futuro libro y no adelantó si discurrirá por derroteros fantásticos u optará por el lado más intimista de su trayectoria.