Viernes, 29 de Noviembre 2024
Cultura | Se le recordará este lunes a un año de su deceso

Abandonó Sabato la ciencia para dedicarse a la literatura

La Fundación Ernesto Sabato, que se espera abra a mediados de año, estará compuesta por manuscritos de reconocidos escritores latinoamericanos, primeras ediciones, fotografías y objetos

Por: NTX

Doctorado en física y con estudios en filosofía. Ernesto Sabato era además de brillante, pleno en conocimientos. ARCHIVO  /

Doctorado en física y con estudios en filosofía. Ernesto Sabato era además de brillante, pleno en conocimientos. ARCHIVO /

CIUDAD DE MÉXICO (29/ABR/2012).- Como un espacio dedicado a explorar los valores humanos, culturales y artísticos que Ernesto Sabato persiguió incansablemente en vida, abrirá sus puertas una casa museo con su nombre, en el marco del natalicio del escritor argentino, a quien se recordará este lunes a un año de su deceso.
 
De acuerdo con el portal de la Fundación Ernesto Sabato, este recinto, que se espera abra a mediados de año, estará compuesto por manuscritos de reconocidos escritores latinoamericanos, primeras ediciones, fotografías y objetos; además, su programa de actividades estará integrado por talleres, conferencias, cursos, obras de teatro y proyecciones documentales.
 
Ernesto Sabato nació en Rojas, provincia de Buenos Aires, el 24 de junio de 1911. Realizó su doctorado en física y cursos de filosofía en la Universidad de La Plata.
 
Tras concluir con sus estudios trabajó un tiempo en el Laboratorio Curie, de París, sin embargo, en 1945 abandonó definitivamente la ciencia para dedicarse exclusivamente a la literatura.
 
Se dice que su decisión se vio influida tras hacer amistad con los escritores y pintores del movimiento surrealista, en especial con André Breton, quien lo alentó en su vocación literaria.
 
En los años 50 atravesó una crisis producto de las contradicciones entre un mundo "claro y luminoso de las matemática", según sus palabras, y el atormentado y complejo mundo de la literatura, detalla el portal español "budapest.cervantes.es".
 
A esta época corresponden sus ensayos "Hombres y engranajes", escrito en 1951, y "Heterodoxia", 1953, en los que realiza una crítica en profundidad sobre el futuro de la ciencia desde una óptica humanista.
 
Fue hasta 1948 que publicó su primera novela, "El túnel", y 13 años después, con la que consiguió la fama internacional fue "Sobre héroes y tumbas"; luego vino "Abaddón el exterminador", una visión apocalíptica de la realidad Argentina, con la que se consagró.
 
Sus convicciones humanas también se ven reflejadas dentro de su pensamiento político, mismo que impregnó en diversos artículos y columnas de la prensa, así como en sus libros "El caso Sabato; torturas y libertad de prensa; carta abierta al General Aramburu" y "El otro rostro del peronismo: carta abierta a Mario Amadeo".
 
Como escritor que ha alentado la defensa de los valores y derechos de la persona, además de su postura contraria a la política dictatorial y autoritaria de algunos políticos argentinos, presidió en 1984 la Comisión Nacional sobre Desaparición de Personas (CONADEP), que redactó el "Informe Sabato".
 
Dicho informe es también conocido en España como "Nunca más", el cual da cuenta de desaparecidos argentinos entre 1976 y 1982.
 
Sabato en 1984 obtuvo el Premio Miguel de Cervantes de Literatura, máximo galardón de las letras españolas, y cuenta en su haber con otras distinciones como el galardón Gabriela Mistral, otorgado por la Organización de Estados Americanos (OEA).
 
Vinculado a la capital argentina, fue nombrado Ciudadano Ilustre de la ciudad de Buenos Aires en 1984 y ocho años después en septiembre de 1992, recibió el título de doctor honoris causa de la Universidad de esa ciudad.
 
Debido a su ceguera, en los últimos años Ernesto Sabato abandonó casi por completo la lectura y la escritura, ocupando su tiempo en la pintura y otras aficiones.
 
En diciembre de 1991 presentó en Barcelona la edición revisada por él mismo, de su obra narrativa, que comprende las novelas, "El túnel", "Sobre héroes y tumbas" y "Abaddón el exterminador".
 
En abril de 1992 expuso 36 de sus cuadros en el Centro Cultural de la Villa, en Madrid.
 
En 1996, el gobierno chileno le concedió el Premio Gabriela Mistral, que compartió con la también argentina María Elena Walsh; y el 9 de septiembre de ese mismo año fue investido doctor "honoris causa" por la Universidad de la República de Uruguay.
 
Otro de los merecimientos que recibió fue el Premio Internacional Menéndez Pelayo, galardón con el que la Universidad de este mismo nombre distingue a personalidades destacadas en el ámbito de la creación literaria, artística o científica, cuya obra pueda evocar por su capacidad humanística la de Menéndez Pelayo.
 
En 1998, el escritor publicó sus memorias "Antes del fin", novela en la que relató sus recuerdos de infancia, sus estudios junto al Premio Nobel de Física argentino Bernardo Houssey y el impacto que le provocaron algunos acontecimientos en este país y en el mundo.
 
En 1999, Ernesto Sabato quiso dejar en "Antes del Fin", su testamento espiritual, un resquicio de esperanza para la utopía que le ha atormentado toda la vida.
 
Sabato quien fue multipremiado por su obra en 2004, recibió un homenaje por parte del III Congreso Internacional de la Lengua Española en presencia de Cristina Fernández de Kirchner y José Saramago.
 
El 11 de febrero de 2009 la Sociedad General de Autores y Editores (SGAE) lo propuso por tercera vez ante la Academia Sueca como candidato al Premio Nobel de Literatura de 2009 junto con los escritores españoles Francisco Ayala y Miguel Delibes, no obstante, no logró obtenerlo.
 
El 30 de abril de 2011, 55 días antes de cumplir 100 años, Sabato falleció en su hogar en Santos Lugares, a causa de una neumonía derivada de una bronquitis que lo aquejaba desde varios meses atrás.

Temas

Lee También

Recibe las últimas noticias en tu e-mail

Todo lo que necesitas saber para comenzar tu día

Registrarse implica aceptar los Términos y Condiciones