Los 7 jugadores que forjaron la rivalidad del Clásico Nacional

El actual gobernador de Morelos, marcó época como americanista, registrando 153 goles. A lo largo de su trayectoria como azulcrema, el Cuau fue recordado por su personalidad, calidad y papel que tomaba en los Clásicos. 

Hasta la fecha, en cada oportunidad que tiene, aprovecha para burlarse del máximo rival. En la edición del Clausura 2021, después de que América derrotara 3-0 a Chivas, afirmó lo siguiente: “No hay que hablar antes de los Clásicos porque después te callan la boquita”, refiriéndose a Antonio “Pollo” Briseño, que unos días antes de dicho enfrentamiento había mencionado que el América “no tenía identidad”. 

Campeón y figura con Chivas en el 2006. Será recordado, entre otras muchas hazañas, por su famosa celebración “cirquera” contra el América, en el Clásico de 2006. 

En esa edición, el entonces entrenador de las Águilas, Manuel Lapuente, afirmó que los rojiblancos eran "un circo de payasos" por los desplegados que hacía Jorge Vergara, dueño del club.

Ya en el encuentro, el “Bofo” metió un gol y festejó junto con Omar Bravo realizando una pirueta que quedará enmarcada como una de las celebraciones más icónicas del Rebaño. 

Es el máximo anotador en la historia de Chivas, con 160 dianas.

En el Apertura 2015, Bravo superó a Chava Reyes como el máximo goleador del club rojiblanco, luego de haber metido un doblete en el triunfo de 2-1 en el Clásico Nacional de aquel año. 

El originario de Los Mochis, Sinaloa, participó en 26 ediciones del Clásico, en las cuales registró 6 goles. 
 

Uno de los máximos referentes en la historia reciente del club azulcrema. En los años 80 lideró la ofensiva de las Águilas. Hasta el momento es el máximo goleador de la institución, con 190 anotaciones. En los Clásicos Nacionales también tiene la dicha de ser el máximo romperredes de la institución, con 10 tantos. 

Pese a la rivalidad que tiene con Chivas, “Zague” le guarda su debido respeto al Deportivo Guadalajara. “El América surge para competir contra una institución que merece todo el respeto de la familia Alves como es el Guadalajara porque mi padre también me enseñó a respetar más allá de la rivalidad, pero sí había que imponer condiciones en este tipo de rivalidad”.
 

Mejor conocido como “Chava” Reyes, es una de las máximas figuras rojiblancas, pues durante muchos años, fue el máximo goleador del Rebaño, con 154 goles. Fue un elemento que eternizó una frase que a la afición rojiblanca identifica: “Yo no soy Chiva de corazón, soy Chiva de nacimiento”. 

El mítico 8 del Rebaño participó en 22 ediciones del Clásico Nacional, siendo el máximo anotador hasta la fecha, con 13 goles. 
 

Considerado por mucha afición como uno de los mejores extranjeros que ha llegado a México, el ex jugador y director técnico del América, tenía un sentimiento de odio natural hacia el Guadalajara cada que se enfrentaba a ellos. 

“En mis tiempos jugar contra Chivas era un odio natural, eran otros tiempos. Uno entraba con esas ganas de querer ganarles, de verdad se sentía un odio, odio natural, no era solo una rivalidad deportiva y lo digo con mucho respeto”, sentenció. 
 

Difícilmente un Clásico Nacional se define por una goleada para alguno de los dos conjuntos. Sin embargo, en el invierno de 1996 el Rebaño goleó 5-0 a las Águilas, duelo en el que Ramón Ramírez anotó un tanto. 

“Lo disfrutamos muchísimo porque vimos el júbilo de la afición una vez que se terminó el partido. Fue histórico en ese momento, significaba algo importante. Nosotros en el vestidor decíamos, en un tono de alegría y emoción, que ese resultado lo íbamos a tratar de conservar y que difícilmente se lo iban a quitar hasta que no pudieran igualar un marcador parecido iban a vivir con eso", mencionó. 

AV