Los océanos del mundo, que absorben la mayor parte del calor provocado por el cambio climático, registraron nuevos récords de calor el año pasado, según un estudio publicado el miércoles 11 de enero.“Los océanos continúan calentándose a nivel mundial”, explicaron los autores de este informe internacional, publicado en la revista “Advances in Atmospheric Sciences”.“El aumento inexorable de las temperaturas oceánicas es el resultado inevitable de un desequilibrio energético de la Tierra, asociado principalmente con una creciente concentración de gases de efecto invernadero”, explicaron los 24 autores del informe, pertenecientes a universidades estadounidenses, chinas e italianas.Los océanos absorben más del 90% del exceso de calor provocado por los gases de efecto invernadero generados por la actividad humana. “La tendencia al calentamiento en todo el mundo es tan regular y robusta que cada año se baten récords”, alertan esos expertos pertenecientes a 16 centros de investigación.El calor total contenido en los océanos entre la superficie y una profundidad de dos mil metros aumentó el año pasado en 10 zettajulios, es decir, un julio (medida básica de calor) seguido de 22 ceros. Esa cifra equivale aproximadamente a 100 veces la producción de electricidad en todo el mundo en 2022.El calentamiento de las aguas oceánicas conlleva un aumento de su salinidad y de su estratificación (la separación en distintas capas). Eso significa que crece la acidez de las aguas, y paralelamente, que no se mezclan con tanta facilidad.Ambos fenómenos pueden alterar los intercambios de calor, carbono y oxígeno entre los océanos y la atmósfera, lo que a su vez tiene consecuencias en la vida marina y los ciclos del agua. “El calentamiento mundial prosigue y se manifiesta en niveles récord de calor en los océanos, así como por niveles extremos en términos de salinidad”, comentó Lijing Cheng, autor principal del estudio. “Este último punto confirma que las zonas saladas cada vez lo son más”, añadió.Una pesadilla ecológica“Los océanos absorben casi todo el calor causado por las emisiones de CO2 de la humanidad”, recordó Michael Mann, profesor de la universidad de Pensilvania y coautor del estudio. “Ese calentamiento continuará hasta que logremos la neutralidad carbono, por lo que seguiremos batiendo récords”, predijo.“Conocer mejor los océanos es la base de las acciones para combatir el cambio climático”, añadió. El fenómeno de calentamiento empezó a ser detectado a finales de los años 1950. Con el calentamiento del agua baja el nivel de oxígeno, lo que es “una pesadilla no solamente para la vida acuática y los ecosistemas, sino también para los seres humanos y nuestros ecosistemas terrestres”, indicaron los investigadores.Un estudio del programa europeo sobre cambio climático Copernicus reveló el pasado martes 10 de enero que los últimos ocho años fueron los más cálidos hasta la fecha. Durante el periodo 2015-2022, cada año registró como mínimo un aumento de su temperatura media de más de un grado centígrado respecto a la media preindustrial.Otro informe publicado por la aseguradora Munich Re indicó que las catástrofes naturales causaron daños valorados en 270 mil millones de dólares en 2022, un monto a pesar de todo inferior a 2021.El 2022 fue un año de extremos climáticos, como sequías o inundaciones, temperaturas récord y concentraciones de gases de efecto invernadero en máximos, según datos del Servicio de Cambio Climático (C3S) de Copernicus, que lo sitúan como el segundo año más cálido en Europa y el quinto a nivel global.Según el informe anual del Clima Mundial en 2022 del C3S, basado en datos captados por el sistema satelital de la Unión Europea (UE) Copernicus y publicado el pasado martes 10 de enero, el verano fue el más caluroso de la historia en Europa y el tercero más cálido a escala planetaria.Cabe señalar que la persistente escasez de precipitaciones, combinada con las altas temperaturas y otros factores, provocó una sequía generalizada y una actividad incendiaria inusualmente alta en el suroeste europeo, especialmente en España y Francia.El 2022 fue el octavo año consecutivo con temperaturas superiores en más de 1°C a las del nivel preindustrial, con termómetros que se situaron más de 2°C por encima de la media del periodo 1991-2020 en zonas del norte de Siberia central y a lo largo de la Península Antártica.Finalmente, el director del C3S, Carlo Buontempo, advirtió que las previsiones apuntan a que en este verano también se alcanzarán temperaturas elevadas.TOMA NOTAAnte las situaciones antes descritas, expertos señalan que urge reducir las emisiones y adaptarse: “2022, fue un año más de extremos climáticos en Europa y en todo el mundo. Estos acontecimientos ponen de manifiesto que ya estamos experimentando las devastadoras consecuencias del calentamiento del planeta”, según la directora adjunta del C3S, Samantha Burgess.En su opinión, el informe del Clima Mundial en 2022 del C3S demuestra claramente que para evitar las “peores consecuencias” es necesario que la sociedad reduzca “urgentemente” las emisiones de dióxido de carbono y se adapte rápidamente al cambio climático. La crisis climática ha crecido a tal grado que en el informe “The Global Risks Report 2023”, elaborado por el World Economic Forum (WEF) o Foro Económico Mundial y presentado el miércoles 11 de enero, los asuntos económicos quedaron relegados fuera de los 10 riesgos principales del WEF para 2023, mientras que la crisis climática, la tensión social y la confrontación geoeconómica levantan las preocupaciones.En dicho reporte, el WEF dio a conocer la lista de los 10 principales riesgos de corto y largo plazo, es decir, a enfrentarse en dos y 10 años, con el gran riesgo de que se combinen diversos y se creen policrisis de consecuencias indescriptibles.Cabe señalar que, “los riesgos de largo plazo en el panorama están dominados por la energía, los alimentos y los desastres naturales. Aquellos que son realmente más vulnerables están sufriendo y enfrentan múltiple crisis, aquellos que se califican como vulnerables y se expanden rápidamente tanto en países pobres como ricos”, dijo la directora gerente del WEF, Saadia Zahidi. Los riesgos de corto plazo son:Los riesgos de largo plazo son:En febrero del 2022, la extensión del hielo marino de la Antártida mostró su nivel diario más bajo en 44 años de registros satelitales. La del Antártico alcanzó valores récord o casi récord durante seis meses. Ambas regiones polares registraron episodios de temperaturas récord.En las regiones tropicales y subtropicales, las temperaturas premonzónicas extremadamente altas en Pakistán y el Norte de la India provocaron prolongadas olas de calor en primavera y máximas y mínimas de récord.El Centro y Este de China sufrieron una prolongada ola de calor, con la consiguiente sequía durante el verano.En julio y agosto, Pakistán registró precipitaciones récord que provocaron inundaciones a gran escala en amplias zonas del país.Australia experimentó temperaturas por debajo de la media y episodios de inundaciones generalizadas, una situación típicamente asociada a la persistencia del fenómeno La Niña y acentuada, probablemente, por la saturación de los suelos.